Tal día como hoy, 13 de diciembre, celebramos anualmente el día de Santa Otilia y Santa Lucía, patronas de optometristas y oftalmólogos respectivamente. El santoral católico las relaciona con la curación milagrosa de enfermedades de la vista, y se festeja el mismo día porque según la tradición ambas murieron el 13 de diciembre. Os contamos su leyenda y su relación con nuestros gremios profesionales.
SANTA LUCÍA
Santa Lucía por Domenico di Pace Beccafumi. Año 1521. |
Nacida en Siracusa (provincia romana de Sicilia) en una familia noble, consagró su vida a la fe cristiana mientras que su madre la comprometía con un noble romano. Tras caer enferma su madre y recuperárse milagrosamente gracias a la fe de su hija, se suspendió el compromiso y se donó la dote en beneficio de los pobres. Su prometido romano en venganza la denunció por profesar la religión cristiana, y Santa Lucía fue llevada a juicio, martirizada y asesinada al atravesarle la garganta con una espada; y según el último relato latino (sigo VI-VII), sacarle los ojos. Su iconografía más popular es la de una joven sosteniendo sus ojos en
una bandeja.
- Es la patrona de la vista, de los oftalmólogos, de los pobres, los ciegos y de los niños enfermos.
- La relación entre Lucía y los ojos, que hace de esta santa protectora de la vista, se explica en la iconografía de la Edad Media y deriva de la cercanía etimológica del nombre griego "Lucía" con el término latino "lux" (luz).
- Existe la leyenda de que fue la belleza de los ojos de Lucía la que no permitía descansar a uno de los pretendientes, por lo que ella se los arrancó y se los envió. Lleno de remordimiento e impresionado por el valor de Lucía, el pretendiente se convirtió al cristianismo.
- Una leyenda medieval decía que, cuando Lucía estaba en el tribunal, aun sin ojos, seguía viendo.
SANTA OTILIA
Iconografía: suele representarse vestida de abadesa con un libro de Regla Benedictina sobre el que reposan unos ojos. |
La historia de Santa Otilia (Odilia
originalmente) cuenta que era hija de un duque alsaciano, pero al nacer ciega, su padre la
repudió. Su madre la envió a un convento donde creció en la fe cristiana
y, a la edad de 12 años, fue bautizada, momento en el que
milagrosamente recuperó la visión.
Posteriormente volvió con su familia, pero acabó huyendo a la Selva Negra cuando su
padre decidió casarla, contrariando sus deseos monásticos. Allí construyó un altar del que brotó un manantial que pronto atrajo a multitud de fieles, ya que se decía que curaba las enfermedades de los ojos. Finalmente su padre convencido de su santidad le regaló el castillo de Hohenburg (Odilienberg o Mont Saint Odile) para transformarlo en un monasterio en el que Otilia sería la abadesa. En este mismo lugar fundó un hospital y la iglesia de San Juan, donde falleció el 13 de diciembre del año 720 d.C. y donde se conserva su cuerpo.
Fuentes
- Sardella, T (2000). «Lucía». En Leonardi, C.; Riccardi, A.; Zarri, G. Diccionario de los Santos. Volumen II. Madrid: San Pablo. pp. 1494-1497. ISBN 84-285-2259-6.
- Pérez-Rioja, José Antonio (1971). «Lucía, Santa (s. III)». Diccionario de símbolos y mitos. Madrid: Editorial Tecnos. p. 275. ISBN 84-309-4535-0.
- http://www.preguntasantoral.es/2010/10/santas-lucia-y-otilia/
- https://dofa.ua.es/es/jornadas-y-otras-actividades/quien-fue-santa-otilia-articulo-elaborado-por-el-optico-optometrista-rafael-jose-perez-cambrodi.html